Texto y fotos: David Gustavo López

El día 18 de junio de 2016, un grupo de veinte personas de la Asociación PROMONUMENTA efectuó una hacendera de desbroce y limpieza en la ciudad astur-romana de Lancia, famosa por la descripción que Floro y Orosio hicieron de los hechos que en ella ocurrieron durante las guerras de Roma contra astures y cántabros. Es célebre, por ejemplo, el párrafo de Floro relativo al final de la batalla y a la actuación que en ese momento tuvo el general Carisio, comandante de las tropas romanas: «La muy poderosa ciudad de Lancia acogió lo que quedaba del ejército derrotado, y en ella se luchó por ese motivo con tal furia que, cuando, una vez tomada, los soldados romanos pedían que se la incendiara, el genera Carisio consiguió con dificultad que fuese perdonada, con el fin de que permaneciendo sin ser destruida por el fuego sirviese como el mejor monumento a la victoria romana».

Las ruinas de Lancia, que después de la conquista fue ocupada por los romanos, construyendo sobre ella otra ciudad que llegó a ocupar una superficie de cien hectáreas, han sido puestas al descubierto, en una pequeña parte, en pasadas campañas arqueológicas. El abandono de los dos últimos años (período que había transcurrido desde la última hacendera de PROMONUMENTA), fue suficiente para que el crecimiento de la maleza casi las cubriese, por lo que se hizo necesario un esfuerzo para poner al descubierto una zona de ellas, la que precisamente corresponde a los edificios que fueron mercado y un posible templo cuya fachada estaba cubierta de mármol.

La hacendera contó con la presencia del arqueólogo de la Diputación, Jesús Celis, que , aparte de dirigir los trabajos, en todo momento trabajó como uno más.

Al final, la Diputación invitó a comer a todos los asistentes, un detalle que se agradeció.