DIARIO DE LEÓN 9-9-2024
El culto secreto a Mitra en la Catedral de León
Un templo hereje. En la Catedral de León hay 111 escenas del dios Mitra, un caso único. El investigador David Gustavo López cree que se trata de un plan preconcebido, que el autor intelectual fue el obispo Martín Fernández y el ejecutor el maestro Enrique.F
Representación de Mitra-Cupido peleando con un dragón. D. G. L.
León
«La Catedral de León es un templo dedicado a Mitra». El investigador David Gustavo López primero lanzó la hipótesis en su libro Historia oculta, enigmática y heterodoxa de León. Su única duda era cómo los maestros canteros se atrevieron a representar el credo de una religión prohibida, exponiéndose a ser ejecutados por herejes. En muchos casos, Mitra quedó ‘camuflado’ como un centauro, como un león p como un soldado. Una de las iconografías esenciales es la de Mitra representado con un gorro frigio, mientras sacrifica a un toro.
En cualquier caso, la deidad está en la Catedral de León en sus distintas metamorfosis, proceso que seguiría un creyente en su ascenso por los siete grados que requiere la iniciación mitraica.
La zona inferior de la cabecera de la Pulchra, a lo largo de todo el perímetro, «alberga una enigmática sucesión de relieves escultóricos que componen un jeroglífico no repetido en ninguna otra catedral ni templo», afirma Gustavo López, que ha publicado las conclusiones de su investigación en un extenso artículo de treinta páginas en la Revista Antropología y Tradiciones Populares.
Estas esculturas se hallan situadas en las enjutas. Solo hay que fijarse. En total hay 111 escenas sobre la vida del dios persa del sol naciente, que heredaron otras culturas y que entre los siglos I y IV tuvo notable implantación entre los legionarios romanos.
El profesor de la Universidad César García Álvarez lleva años descifrando la iconografía de la Catedral. Afirma que las 111 enjutas del templo leonés componen un conjunto único en el mundo. Así lo explica en su libro El laberinto del alma. Iconografía, geometría y simbolismo en la Catedral de León.
Esta religión mistérica que fue exterminada por el cristianismo en el siglo IV, muy posiblemente —piensa García Álvarez—, llegó a León con la Legio VII. El profesor leonés afirma que tuvo que haber un «cerebro pensante» de toda esta iconografía. Un canónigo ilustrado, «alguien con una cultura extraordinaria». Se trata de imágenes con concepciones que no pertenecen a la teología del momento, a medio camino entre la ortodoxia y la heterodoxia.
«Mitra, como cualquier otro dios de la antigüedad, también posee su mitología, hoy reconstruida parcialmente a partir de estatuas y pinturas halladas en los mitreos y de unos pocos textos, de cuyo estudio en España ha sido pionero el profesor García y Bellido ( El culto a Mithras en la Península Ibérica). sostiene Gustavo López en su trabajo.
No hay textos escritos sobre el mitraísmo, así que las únicas fuentes para conocer esta religión son las imágenes que se han preservado.
El ideólogo del ‘mitreo catedralicio’ —según Gustavo López— pretendió erigir dentro de la Pulchra un templo dedicado a esta deidad, «disimulado mediante una iconografía alusiva en muchas ocasiones a luchas contra vicios y pecados, tan en boga durante los períodos románico y principios del gótico, intentando disipar de esta manera los recelos que pudieran surgir en la mente de clérigos suspicaces». Es así como la deidad oriental prohibida desde el siglo III consiguió pasar desapercibida en la Catedral leonesa para los no iniciados.
García Álvarez considera que las esculturas del templo leo nés serían las primeras representaciones góticas del Purgatorio —cuyo reconocimiento oficial efectuó el Papa Inocencio IV en el año 1254, poco antes de se iniciasen estos relieves de la Catedral—. Gustavo López no se aparta de un plan premeditado para ‘colar’ la religión mitraica en un templo cristiano. Destaca también que las imágenes cruciales de esta deidad se concentran en la capilla de la Virgen Blanca.
El ideólogo y el ejecutor
Gustavo López se atreve a aventurar el nombre del ‘ideólogo’ que camufló el culto mitraico en la Catedral. El importante y versado hereje mitraísta no podía ser cualquiera. Tenía que tener el poder suficiente para dirigir la construcción de la Catedral. Apunta nada menos que al obispo Martín Fernández, decidido promotor del templo leonés.
«Cuando en 1289 falleció el obispo Martín Fernández, la cabecera de la Catedral estaba concluida e incluso abierta a los fieles, lo que induce a pensar que el hipotético mitreo también lo estaba y que, en consecuencia, fue ejecutado bajo su mandato». Este obispo sería el «autor intelectual», mientras que el ejecu tor sería el maestro Enrique, que también trabajó en las catedrales de Saint-Denis y de Burgos hasta su muerte en 1277.
Y da otra pista más: «Sobre el sepulcro del obispo Martín Fernández, calificado como ‘obra maestra del arte funerario de la catedral’, en cada una de las enjutas de los tres arcos góticos que lo enmarcan, está calada una roseta con forma de trébol de tres hojas». Concluye que «la cosa no tendría más importancia» si no fuera porque algunos de los relieves mitraicos de la Catedral leonesa tienen como fondo, precisamente, un trébol de tres hojas.
Un plan preconcebido
Gustavo López ha encontrado 111 escenas del dios Mitra en la Catedral de León