LA NUEVA CRÓNICA 23-5-2021
Nueve locomotoras históricas y la casa de Gil y Carrasco, a punto de desaparecer
EL BIERZO IR

Las locomotoras se reparten en las playas de vías, sin una mirada que las consiga sacar del olvido.| H.N.
Nueve locomotoras históricas y la casa de Gil y Carrasco, a punto de desaparecer
Sociedad La asociación Hispania Nostra las incluye en su Lista Roja con la intención de dar un toque de atención y que las autoridades procuren conservar lo que queda de ellas
La Asociación
Hispania Nostra ha subido a su ‘Lista Roja’ del Patrimonio dos
elementos bercianos con el fin de poner los ojos sobre ellos e intentar que el
olvido no siga llevándolos a la desaparición. A la lista se ha subido la casa
natal de Gil y Carrasco en Villafranca del Bierzo y las viejas locomotoras
de la MSP en Ponferrada. En este caso se trata de un conjunto de nueve
locomotoras hoy abandonadas a los pies de la vía.
El portavoz del comité científico de Hispania Nostra, Alfonso Muñoz
reconoce que en ambos casos la carencia de estos elementos ha sido la de llevar
a cabo un mantenimiento que no les permitiera el deterioro que tienen en la
actualidad. La falta de conservación hace que la lista roja los recoja con el
fin de despertar o servir de «llamada de atención» a las autoridades y
que tomen medidas al respecto.
Hispania Nostra recuerda que la extinta Sociedad Anónima Minero
Siderúrgica de Ponferrada acumuló un importante parque de locomotoras de
vapor para dar servicio al ferrocarril de la línea Ponferrada – Villablino,
inaugurado en 1919 y promovido por el ministro Francisco Cambó. Destacó
por ser la última línea de Occidente en la que se utilizaron locomotoras de
vapor. Pero la tracción diésel hizo que quedaran relegadas, sobre los años 80.
De hecho las locomotoras PV 19 y PV 31 fueron las últimas en apagarse en
1989.
Una vez apartadas del servicio, según explica Daniel Pérez Lanuza, el
grueso del parque de locomotoras de MSP se mantuvo semiabandonado en los
antiguos solares de la Compañía en Ponferrada hasta 1998, cuando se rescataron
algunas para el Museo Municipal del Ferrocarril de Ponferrada. Las
últimas locomotoras en funcionamiento, la PV-19 Krauss (Munich 1920), comprada
al ‘Ferrocarril de la Robla’ en 1961 y la locomotora PV31, Maffei (Munich
1913) adquirida al ‘Ferrocarril de Plazaola’ fueron restauradas, pero otras
muchas no corrieron la misma suerte.
Las locomotoras que no tuvieron la fortuna de integrar la colección del museo
fueron colocándose en distintos lugares, casi siendo arrinconadas y olvidadas en
las antiguas playas de vías, convertidas en escenario de graffitis. Entre
las nueve locomotoras abandonadas se distinguen 2 locomotoras Krauss
fabricadas en Múnich en 1914, 5 locomotoras Baldwin fabricadas en Estados
Unidos, y 2 locomotoras Macosas más recientes fabricadas en España en la
década de 1950 en la factoría de Barcelona. En la actualidad, estas locomotoras
no tienen una protección específica y su estado de conservación es de
«abandono», define la Lista Roja y «de extrema vulnerabilidad, con
amenaza grave de desaparición».
«Décadas de abandono a la intemperie, vandalizadas y sometidas a una
climatología adversa amenazan el reducir a óxido estas centenarias locomotoras.
Carecen de una figura jurídica de protección patrimonial de ámbito autonómico»,
apunta. Por eso se incluyen en la lista, que entiende que su valor patrimonial
«atiende a la dimensión técnica, estética y simbólica que rodea a la tracción
vapor. Las locomotoras de vapor constituyeron el emblema de la línea de
ferrocarril Ponferrada-Villablino», advierte.
El alcalde de Ponferrada, Olegario Ramón lamentó el estado de las
locomotoras y da por hecho que no todas podrán recuperarse, aunque espera que
algunas se incluyan en el proyecto de recuperación de la placa ferroviaria como
un elemento de arquitectura industrial de la ciudad. Un proyecto de grandes
dimensiones que busca alianzas fuertes «porque hace falta un músculo
financiero importante», explica Ramón. Pero apunta que «lo que allí hay no
se ha destruido en dos años que lleva este equipo de Gobierno, es un ejemplo de
la dejación de funciones », lamenta el actual regidor.
La cuna de Gil se cae
En la
Lista Roja se apunta también la casa en la que nació el escritor romántico
Enrique Gil y Carrasco. Una casa blasonadas en la popular Calle del Agua de la
localidad de Villafranca del Bierzo. Enrique Gil, autor de «El Señor de
Bembibre» entre otras cosas, nació en 1815 en esta casa ya que su padre, Juan
Gil, natural de Soria, era el administrador de las fincas del marqués de
Villafranca y de la Colegiata de Villafranca.
En esta casa vivió la familia hasta 1821, fecha en la que salió a la luz
una estafa del padre a los marqueses por valor de 20.114 reales. Este hecho
provocó que la familia se trasladase a Ponferrada, donde también hay
otra vivienda que recuerda su paso por esta localidad. Su casa de nacimiento
tiene dos plantas, 400 metros cuadrados y es diáfana en su interior.
A cada lado del balcón, hay una placa conmemorativa que recuerda que allí nació
el escritor Enrique Gil y Carrasco, pero eso no ha hecho que el inmueble
se ponga en valor. De hecho lleva cuatro años a la venta porque el Ayuntamiento
de Villafranca dice no tener capacidad económica para asumir la compra y
arreglo, expone Hispania Nostra.
La vivienda no tiene protección alguna y está en ruinas. Solo se
conserva su fachada y en 2020 se derrumbaron parte de uno de los balcones de la
fachada. Su estado es de «ruina inminente».




