Abre el Museo de Semana Santa de León, «la casa de
todos los papones»
La dirección habla de «ilusión» en las
cofradías tras conocer el resultado, que suma arte y fe a lo largo de ocho
salas con tallas procesionales y de las parroquias
Sala de la Crucifixión del Museo Diocesano y de Semana Santa de León. | SAÚL ARÉN
Ahora sí, el Museo Diocesano y de Semana Santa de
León ya es una realidad. Este espacio expositivo, que pretende
ser «la casa de todos los papones» al tener
representadas a las 16 cofradías y hermandades será inaugurado este martes y recibirá a
sus primeros visitantes el miércoles. Han tenido que pasar cuatro
años desde la apertura oficial del edificio y ocho desde el inicio de las obras,
que costaron 7,8millones de euros, de los cuales 5
millones los aportó la Diócesis de León, 2,1 millones la Junta, 500.000 euros
el Ayuntamiento y 200.000 euros la Diputación.
En la inauguración de este martes estarán representadas
todas las entidades que han hecho posible este «esperado y deseado»
museo pero antes, tras años de polémicas (como el patio inutilizado, el
fracaso de las donaciones privadas que se quedó en 5.0000 euros o la ausencia
de pasos completos), la dirección del museo organizó este lunes una
visita y rueda de prensa con los medios de comunicación, a los que se les
trasladó que las cofradías han renovado su «ilusión» al conocer el
resultado de un espacio que vieron de primera mano el pasado sábado 200
personas de las penitenciales de la ciudad.
Representación de los hábitos de las cofradías de León. | SAÚL ARÉN
La Fundación del Museo reconoció «planteamientos
equivocados» en la construcción del Museo y cierto
«desaliento» en las cofradías durante estos años, que finalmente
parecen haberse disipado al ver de cerca los conjuntos escultóricos, para
pensar, ahora sí, que este espacio cultural «merecía la pena».
El Museo, escultórico principalmente pero con objetos de
orfebrería y textil, tiene un sentido cronológico de la Pasión, Muerte
y Resurrección de Cristo a través de las tallas y otros enseres
cedidos por las 16 penitenciales de la ciudad. A lo largo de las ocho salas, se
exponen 346 piezas, 120 donadas por las cofradías y distribuidas
en las primeras siete salas y una última que contiene 226 piezas procedentes de
diferentes parroquias de la Diócesis y que han sido restauradas en su mayoría.
Presentación del Museo de Semana Santa de León. | SAÚL ARÉN
El Museo expone 346 piezas sin barreras y con exquisito
trabajo artístico con la luz y escenografía religiosa
El arte de este Museo se expone sin barreras de ningún tipo,
de tal manera que es posible admirar de cerca las imágenes de la Semana
Santa leonesa que no están expuestas al culto y todo ello gracias a un
exquisito trabajo artístico de iluminación y escenografía religiosa,
con frases bíblicas que ayudan a comprender el sentido de lo
representado.
Dada la doble naturaleza del Museo, Diocesano y de Semana
Santa, la Fundación responsable del mismo, que preside el vicario general Luis
García, eligió dos directores: Alejandro Grande es ya el
responsable de la parte de Semana Santa e Iván González lo es
de la diocesana.
La Borriquilla da inicio a una exposición que tiene un sentido cronológico de la Pasión de Cristo. | SAÚL ARÉN
La primera sala del Museo contiene tallas previas a la muerte de Cristo. | SAÚL ARÉN
Museo de Semana Santa de León. | SAÚL ARÉN
El precio de las entradas generales al Museo es de 6
euros, si bien existen tarifas reducidas y la posibilidad de adquirir
un pase anual –como ocurre en la Catedral– por 9
euros, con descuento de 2 euros para los hermanos de las cofradías. El horario de
apertura será de martes a sábado de 10:00 a 13:30 horas y de 16:30 a 19:00
horas y el domingo abrirá en horario de mañana de 10:00 a 13:30 horas.
Por último, cabe señalar que la Fundación del Museo ha
prohibido la celebración de cenas en el patio acristalado de la Museo,
si bien no descartan usos de carácter privado, teniendo preferencia la
utilización por las cofradías
Con motivo del Día Internacional del Patrimonio Mundial, la Asociación de amigos del patrimonio cultural de León, ProMonumenta, organizó para el martes día 19 de noviembre una mesa redonda en la que, junto al presidente de la Asociación, Marcelino Fernández, participaron el profesor titular de Historia del Arte jubilado, Emilio Morais Vallejo, el arquitecto Ramón Cañas Aparicio, el arqueólogo Emilio Campomanes Alvarado y el profesor jubilado y escritor, Carlos Taranilla de la Varga.
Este encuentro ha servido para tratar «todo lo relacionado con la conservación, restauración y utilización del patrimonio leonés así como su utilidad (promoción e identidad cultural)». Durante el acto también tuvieron protagonismo «las recientes destrucciones del patrimonio y las intervenciones acertadas». Además de los ponentes, intervinieron todas las personas que lo desearon.
El evento siguió la línea de objetivos de ProMonumenta, que lleva más de 32 años dedicada de forma altruista a la defensa, el cuidado y la divulgación del patrimonio leonés, y se celebró en el salón de actos del Ayuntamiento de León.
Por tercer año, el Instituto Leonés de Cultura de la Diputación Provincial ha convocado sus Premios Concejo, unos galardones pensados para reconocer las mejores aportaciones a las diferentes facetas y lenguajes de la cultura llevadas a cabo por creadores nacidos en alguna de las comarcas leonesas o directamente vinculados a ellas. Como en años anteriores, el certamen cuenta con cinco categorías, las de Letras, Artes Plásticas, Música, Patrimonio e Interpretación y Medio Audiovisual, dotadas con 5.000 euros además de con la icónica estatuilla del escultor Amancio González que simboliza el trabajo en equipo y la toma en común de decisiones, base del tradicional concejo leonés. El plazo de recepción de candidaturas para esta tercera edición de los premios finalizó el 14 de octubre.
Creados en el año 2022, los Premios Concejo de la Cultura Leonesa tienen como principal finalidad distinguir una labor, tanto concreta como continuada en el tiempo, de especial notoriedad e importancia a lo largo de los meses anteriores, una labor que suponga un destacado beneficio para la provincia de León y que constituya un modelo y un testimonio ejemplar para la sociedad.
PROMONUMENTA anticipa que, según fuentes bien informadas, el premio de 2024, en su categoría de Patrimonio, ha sido concedido a esta asociación por sus conocidos trabajos orientados a la recuperación del Patrimonio de la provincia de León.
CONFIRMADO
Los medios de comunicación del día 14 de noviembre de2024 confirman la noticia de que el jurado ha concedido el Premio Concejo, en categoría Patrimonio, a la Asociación de Amigos del Patrimonio de León PROMONUMENTA.
He aquí algunas de las noticias:
LA NUEVA CRÓNICA 13-11-2024
Los Premios Concejo de este
año ya tienen ganadores
Antonio Manilla, Pepe Tabernero, Teresa Gancedo,
Promonumenta y David Álvarez Cárcamo se alzan con los galardones en esta
tercera edición
El jurado en esta edición de los Premios Concejo. | L.N.C.
Las ya icónicas
estatuillas diseñadas por el escultor Amancio
González tienen nuevos dueños al haberse
celebrado la reunión y deliberación del jurado de los Premios
Concejo de la Cultura Leonesa, galardones
propios del ILC y de la Diputación Provincial que este año alcanzan su tercera
edición. El escritor Antonio Manilla en Letras, la creadora plástica Teresa
Gancedo en Artes, el investigador de la cultura tradicional David Álvarez
Cárcamo en Música, la asociación Promonumenta en Mejor Contribución al Patrimonio
Leonés y el programador y gestor cultural José Luis Tabernero en Medio
Audiovisual han sido los ganadores de ‘los Concejo’.
En esta
ocasión, el jurado estuvo formado por Rodrigo
Martínez, músico, productor y divulgador del
folclore; Pablo Andrés Escapa, escritor; e Isabel Medarde, directora de cine -ganadores de los Premios Concejo 2023 en las
categorías de Música, Letras y Medio Audiovisual, respectivamente-, así como
por Luis García, director del Departamento de Arte y Exposiciones del ILC; Jesús
Celis, responsable del Departamento de
Patrimonio de esta institución; y Emilio
Martínez Morán, diputado de Arte, Cultura y Patrimonio.
El Premio
Concejo de las Letras va a parar a manos de Antonio
Manilla (León, 1967) por su excelente
dominio tanto del verso como de la prosa, ambos lenguajes con los que ha
alcanzado premios relevantes a nivel nacional, así como por su destreza a la
hora de integrar el paisaje y la cultura de su comarca de origen, el valle del
Torío, en algunas de sus creaciones. Poeta, narrador, editor y ensayista,
Antonio Manilla es un gran exponente de toda una generación de autores leoneses
que, en estos momentos, se encuentra en plenitud y está ofreciendo a los
lectores algunas de sus mejores y más maduras obras.
Por su parte,
la veterana creadora Teresa Gancedo (Tejedo del Sil, 1937) obtuvo el Premio Concejo de las Artes Leonesas por
toda una carrera dedicada de forma intensa y fecunda a la investigación y la
experimentación. Su obra, muy ecléctica y personal, integra todo tipo de
materiales y técnicas, desde el dibujo, la pintura y el grabado hasta la
cerámica, los textiles y toda una serie de elementos sencillos y cotidianos que
son elevados a una condición superior. El jurado recordó que estamos “ante una
de las pocas artistas españolas que ha expuesto en el Museo Guggenheim de Nueva
York”, en cuya colección figura también obra suya, y que su ejemplo y su legado
son los de una “artista completa”.
En cuanto al
premio de la Música Leonesa, los miembros del jurado acordaron su concesión
a David Álvarez Cárcamo (Vitoria, 1982), un incuestionable valor en todo lo relacionado con
la investigación, recopilación y renovación del folclore y la cultura
tradicional de todas nuestras comarcas. Licenciado en Historia por la
Universidad de León, desde 2008 hasta la actualidad trabaja como profesor de
Secundaria de Geografía e Historia. Conferenciante, divulgador y autor de
varios libros y recopilaciones discográficas, es especialista en romancero y
dueño de uno de los archivos de informantes de la tradición leonesa más amplios
de cuantos existen en el momento. El jurado valoró, ante todo, el apasionado
afán de Álvarez Cárcamo por servir como enlace entre los últimos detentadores
de la cultura tradicional leonesa y las nuevas generaciones.
El Premio
Concejo a la Mejor Contribución al Patrimonio Leonés recayó en la
asociación Promonumenta, el más veterano, activo y reivindicativo de los colectivos relacionados
con el patrimonio histórico-artístico de esta tierra. Fue creada en 1993 con
los objetivos de atender el patrimonio más abandonado, cuidando de él a través
de limpiezas (las ya célebres ‘hacenderas’) y otras acciones encaminadas a
concienciar a los ciudadanos sobre la importancia capital de mantener y poner
en valor los diferentes elementos del legado cultural y, por medio de estos,
también a las autoridades. Sus acciones de reivindicación, su revista de
investigación y difusión, sus conferencias y encuentros, así como sus viajes
culturales, les han convertido en los grandes guardianes del patrimonio
leonés.
Por último, el
Premio Concejo en la modalidad de Medio Audiovisual fue a parar a José
Luis Tabernero Curto (Salamanca, 1957), quien estuvo al
frente del Área de Actividades Culturales de la Universidad de León durante más
de tres décadas. Accedió al cargo en 1990 y desde entonces programó más de seis
mil actividades, sobre todo relacionadas con las artes escénicas, la música y
el cine. El jurado destacó su compromiso inquebrantable con la difusión
cultural entre todo tipo de públicos, así como la profesionalidad y el criterio
de los que hizo gala y con los que llevó a cabo una función unánimemente
elogiada por diferentes sectores sociales, hasta el punto de que no pocos
grupos y compañías foráneos que giraban por España y que actuaban solo en dos o
tres grandes ciudades del país, lo hacían también en el Ateneo Cultural El
Albéitar gracias a la iniciativa del por todos conocido como Pepe Tabernero. El
premio es, por tanto, un “tributo y un homenaje” de toda la sociedad hacia
aquella inolvidable y fundamental labor.
INFOBIERZO
14-11-2024
El ILC
distingue con su premios Concejo a Antonio Manilla, Pepe Tabernero, Teresa
Gancedo, Promonumenta y David Álvarez Cárcamo
El jurado
de los premios Concejo del Instituto Leonés de Cultura y de la Diputación
Provincial ya ha decidido a los permiados de la edición 2024 en todas sus
categorías. Unos premios dotados con 5.000 euros y una estatuilla de Amancio
González
Foto de los galardonados en los Premios Concejo 2023
El jurado
de los premios Concejo del Instituto Leonés de Cultura y de la Diputación
Provincial acordó otorgar esta distinción que alcanza su tercera edición al escritor Antonio Manilla en Letras, la creadora plástica Teresa Gancedo en Artes, el investigador de la cultura tradicional David
Álvarez Cárcamo en Música, la asociación
Promonumenta en Mejor Contribución al Patrimonio
Leonés y al programador y gestor cultural José
Luis Tabernero en Medio Audiovisual.
Acto de entrega de los premios Concejo 2023
Los Premios
Concejo de la Cultura Leonesa están
destinados a distinguir, anual y públicamente, a personas
físicas o jurídicas que, de manera especial, hayan destacado en
diferentes ámbitos de la cultura.
Tienen
como finalidad el reconocimiento de una labor, tanto
continuada como concreta, de especial notoriedad e importancia, una labor
que suponga un destacado beneficio para la
provincia de León y que constituya un modelo y un
testimonio ejemplar para esta sociedad. Están
dotados con 5.000 euros y una estatuilla diseñada por el escultor Amancio
González y serán entregados próximamente en un
escenario de la provincia aún por concretar.
En esta
ocasión, el jurado estuvo formado por Rodrigo Martínez, músico, productor y divulgador del folclore; Pablo
Andrés Escapa, escritor; e Isabel
Medarde, directora de cine -ganadores de los
Premios Concejo 2023 en las categorías de Música, Letras y Medio Audiovisual,
respectivamente-, así como por Luis
García, director del Departamento de Arte y Exposiciones
del ILC; Jesús Celis, responsable del Departamento de Patrimonio de esta institución; y Emilio
Martínez Morán, diputado de Arte, Cultura y Patrimonio.
Foto de los galardonados en los Premios Concejo 2023
ILEÓN
14-11-2024
El Instituto Leonés de Cultura nombra a Promonumenta,
Teresa Gancedo o Antonio Manilla como nuevos premios Concejo
También el investigador de la cultura tradicional David Álvarez Cárcamo o el gestor cultural José Luis Tabernero han sido galardonados en esta nueva edición
Jurado de la tercera edición de los premios Concejo del Instituto Leonés de Cultura.
Las ya icónicas estatuillas
diseñadas por el escultor Amancio González -dos manos abiertas a la
colaboración, la creatividad y el trabajo en común- tienen nuevos dueños al
haberse celebrado la reunión y deliberación del jurado de los Premios Concejo
de la Cultura Leonesa, galardones propios del Instituto Leonés de Cultura (ILC)
y de la Diputación Provincial que este año alcanzan su tercera edición.
El escritor Antonio Manilla en
Letras, la creadora plástica Teresa Gancedo en Artes, el investigador de la
cultura tradicional David Álvarez Cárcamo en Música, la asociación Promonumenta
en Mejor Contribución al Patrimonio Leonés y el programador y gestor cultural
José Luis Tabernero en Medio Audiovisual han sido los ganadores de ‘los
Concejo’.
En esta ocasión, el jurado
estuvo formado por Rodrigo Martínez, músico, productor y divulgador del
folclore; Pablo Andrés Escapa, escritor; e Isabel Medarde, directora de cine
-ganadores de los Premios Concejo 2023 en las categorías de Música, Letras y Medio
Audiovisual, respectivamente-, así como por Luis García, director del
Departamento de Arte y Exposiciones del ILC; Jesús Celis, responsable del
Departamento de Patrimonio de esta institución; y Emilio Martínez Morán,
diputado de Arte, Cultura y Patrimonio.
Reunidos en el Edificio Fierro,
sede del Instituto Leonés de Cultura, el jurado decidió que el Premio Concejo
de las Letras, que se configura como un hasta ahora inexistente Premio de la
Crítica de la región leonesa, fuera a parar a manos de Antonio Manilla (León,
1967) por su excelente dominio tanto del verso como de la prosa, ambos
lenguajes con los que ha alcanzado premios relevantes a nivel nacional, así
como por su destreza a la hora de integrar el paisaje y la cultura de su
comarca de origen, el valle del Torío, en algunas de sus creaciones. Poeta,
narrador, editor y ensayista, Antonio Manilla es un gran exponente de toda una
generación de autores leoneses que, en estos momentos, se encuentra en plenitud
y está ofreciendo a los lectores algunas de sus mejores y más maduras obras.
Por su parte, la veterana
creadora Teresa Gancedo (Tejedo del Sil, 1937)obtuvo el Premio Concejo de las
Artes Leonesas por toda una carrera dedicada de forma intensa y fecunda a la
investigación y la experimentación. Su obra, muy ecléctica y personal, integra
todo tipo de materiales y técnicas, desde el dibujo, la pintura y el grabado
hasta la cerámica, los textiles y toda una serie de elementos sencillos y
cotidianos que son elevados a una condición superior. El jurado recordó que
estamos “ante una de las pocas artistas españolas que ha expuesto en el Museo
Guggenheim de Nueva York”, en cuya colección figura también obra suya, y que su
ejemplo y su legado son los de una “artista completa”.
En cuanto al premio de la
Música Leonesa, los miembros del jurado acordaron su concesión a David Álvarez
Cárcamo (Vitoria, 1982), un incuestionable valor en todo lo relacionado con la
investigación, recopilación y renovación del folclore y la cultura tradicional
de todas nuestras comarcas. Licenciado en Historia por la Universidad de León,
desde 2008 hasta la actualidad trabaja como profesor de Secundaria de Geografía
e Historia. Conferenciante, divulgador y autor de varios libros y
recopilaciones discográficas, es especialista en romancero y dueño de uno de
los archivos de informantes de la tradición leonesa más amplios de cuantos
existen en el momento. El jurado valoró, ante todo, el apasionado afán de
Álvarez Cárcamo por servir como enlace entre los últimos detentadores de la
cultura tradicional leonesa y las nuevas generaciones.
El Premio Concejo a la Mejor
Contribución al Patrimonio Leonés recayó en la asociación Promonumenta, el más
veterano, activo y reivindicativo de los colectivos relacionados con el
patrimonio histórico-artístico de esta tierra. Fue creada en 1993 con los
objetivos de atender el patrimonio más abandonado, cuidando de él a través de
limpiezas (las ya célebres ‘hacenderas’) y otras acciones encaminadas a
concienciar a los ciudadanos sobre la importancia capital de mantener y poner
en valor los diferentes elementos del legado cultural y, por medio de estos,
también a las autoridades. Sus acciones de reivindicación, su revista de
investigación y difusión, sus conferencias y encuentros, así como sus viajes
culturales, les han convertido en los grandes guardianes del patrimonio
leonés.
Por último, el Premio Concejo
en la modalidad de Medio Audiovisual fue a parar a José Luis Tabernero Curto
(Salamanca, 1957), quien estuvo al frente del Área de Actividades Culturales de
la Universidad de León durante más de tres décadas. Accedió al cargo en 1990 y
desde entonces programó más de seis mil actividades, sobre todo relacionadas
con las artes escénicas, la música y el cine. El jurado destacó su compromiso
inquebrantable con la difusión cultural entre todo tipo de públicos, así como
la profesionalidad y el criterio de los que hizo gala y con los que llevó a
cabo una función unánimemente elogiada por diferentes sectores sociales, hasta
el punto de que no pocos grupos y compañías foráneos que giraban por España y
que actuaban solo en dos o tres grandes ciudades del país, lo hacían también en
el Ateneo Cultural El Albéitar gracias a la iniciativa del por todos conocido
como Pepe Tabernero. El premio es, por tanto, un “tributo y un homenaje” de
toda la sociedad hacia aquella inolvidable y fundamental labor.
Los Premios Concejo de la
Cultura Leonesa están destinados a distinguir, anual y públicamente, a personas
físicas o jurídicas que, de manera especial, hayan destacado en diferentes
ámbitos dela cultura. Tienen como finalidad el reconocimiento de una labor,
tanto continuada como concreta, de especial notoriedad e importancia, una labor
que suponga un destacado beneficio para la provincia de León y que constituya
un modelo y un testimonio ejemplar para esta sociedad. Tal y como recoge la
reglamentación oficial de los premios, estos están divididos de acuerdo con las
siguientes categorías: Artes Plásticas, mejor contribución al Patrimonio
Leonés, Música, Interpretación/ Medio Audiovisual, y Letras Leonesas. Los
premios están dotados con 5.000 euros y la estatuilla diseñada por el escultor
Amancio González, y serán entregados próximamente en un escenario de la
provincia aún por concretar.
La protección no resuelve la incertidumbre de su futuro ante el estado de
deterioro
El patrimonio minero de La
Recuelga ya es BIC, ¿ahora qué?
El propietario, el mismo que promueve la planta fotovoltaica que ya tiene
autorización previa, debe evitar su pérdida y las entidades locales también son
responsables
Vista del lavadero de carbón de Antracitas de Fabero, en La Recuelga (Santa
Cruz del Sil). L. DE LA MATA
La declaración de Bien
de Interés Cultural del conjunto industrial minero de La Recuelga (Santa Cruz del Sil)
pone fin a años de reivindicaciones para tratar de garantizar su protección,
desde que en los primeros días de 2022 se hizo pública la intención de la
empresa Genelec Invest S.A. de construir una planta fotovoltaica en los mismos
terrenos y derribar los edificios existentes, incluidos los dos lavaderos que
la Junta de Castilla y León acaba de blindar dentro de un Conjunto Etnológico
que incluye lo que queda de la vieja línea de baldes. La Recuelga ya es BIC,
pero eso no resuelve la incertidumbre sobre su futuro, sobre todo teniendo en
cuenta el avanzado estado de deterioro de las instalaciones, incluidas en la
Lista Roja del patrimonio.
Garantizar que sigan en pie es ahora una obligación tanto de los
propietarios (los mismos que promueven la planta solar que tiene autorización
de Industria y sigue adelante) como de las entidades locales que, a partir de
ahora, tienen acceso a ayudas específicas y beneficios fiscales.
«La normativa de Patrimonio Cultural establece que son los propietarios y
demás titulares de derechos los obligados a conservarlos, custodiarlos y
protegerlos para evitar su pérdida o deterioro. Las entidades locales también
son responsables de proteger los bienes que se ubiquen en su ámbito territorial
y con el fin de facilitar el cumplimiento de este deber, la Consejería de
Cultura, Turismo y Deporte viene convocando subvenciones y desarrollando
programas de concertación con titulares y gestores», explicaron fuentes de la
misma.
Haber alcanzado el estatus de BIC no es más que el primer paso para la
puesta en valor del legado minero de La Recuelga. De nada sirve tal
reconocimiento si el contexto sigue siendo de inacción, más cuando todo parece
apuntar a que el terreno industrial que rodea los lavaderos acabará sembrado de
placas solares. A este respecto, lo único que dice la Consejería de Cultura y
Turismo es que «en efecto, esta instalación ya cuenta con una autorización
administrativa previa y sigue su tramitación en los órganos correspondientes».
También aclara, eso sí, que «cualquier intervención que se quiera acometer debe
contar con la autorización de la Comisión Territorial de Patrimonio Cultural».
La herida abierta en la cubierta de la estación de recepción del teleférico
del lavadero y cargue de Victoriano González ha seguido ganando perímetro en
los últimos meses y a duras penas resistirá el ataque de un nuevo invierno. Su
situación es crítica aunque ahora goce de protección oficial. «Han de ser las
administraciones públicas y los agentes locales los que se ocupen de conseguir
que este legado pase cuanto antes a titularidad pública, haciendo frente al
avance de su deterioro y dando pasos para su puesta en valor», ha reclamado el
Club Xeitu, uno de los defensores de La Recuelga.
La Junta de Castilla y León ha iniciado las obras de reforma y
acondicionamiento del Torreón de los Pernía, situado en Otero de Escarpizo
(León), a fin de materializar una renovación general del inmueble con una
inversión de 54.588 euros. La Junta ha informado, a través de un comunicado,
que la renovación de este inmueble se desarrollará a través de varias líneas de
actuación con el objetivo de solucionar los problemas de conservación que
presenta actualmente el edificio.
Para ello, se procederá a la reparación parcial de la cubierta y de los
sistemas de evacuación de pluviales; la conservación de la fachada principal,
con especial cuidado sobre la restauración de los escudos; la reforma de los
acabados exteriores del edificio auxiliar; y las reparaciones varias de
acabados e instalaciones.
El delegado territorial de la Junta en León, Eduardo Diego; acompañado por
la jefa del Servicio Territorial de Cultura, Amelia Biaín, y la alcaldesa del
municipio, María Teresa García, visitó esta semana este Centro Cultural
Etnográfico para conocer los detalles de la intervención. «Esta actuación se
suma a la sustitución del ascensor prevista y llevada a cabo por la
administración autonómica en el mismo inmueble y que va a suponer una inversión
de, aproximadamente, 30.000 euros», ha indicado Diego. Este Bien de Interés
Cultural (BIC) forma parte del acervo cultural de la localidad de Otero de
Escarpizo y, por extensión, de todo el municipio de Villaobispo de Otero.
Emblema de la localidad y de buena parte de la comarca de la Cepeda, resulta
ser, prácticamente, la única muestra de arquitectura palaciega del entorno. En
este aspecto, cabe destacar que esta casona palacio cuenta con tres escudos de
valor histórico, alojados en sus muros, que son indisolubles e inalterables de
su situación.
El edificio consta de un volumen rectangular de dos plantas, construido
probablemente a finales del siglo XVI o principios del siglo XVII, que contaba
con un torreón adosado de tres plantas. Además, se cree que el edificio tuvo un
corral posterior que completaba la forma original de un cuadrado, del que se
intuyen huellas en los muros laterales del torreón y restos de basas o pilares
dispersos por el edificio.
La construcción es de fábricas de sillarejo bastardo, estructuras y
tablazón de madera y cubierta de teja cerámica árabe.
El empleo de estos sistemas tradicionales deja traslucir cierto poder
económico en un entorno donde las casas eran de tapia o barro. El palacio,
residencia de la familia Pernía o de sus herederos hasta hace apenas 70 u 80
años, pasó posteriormente a manos de la Iglesia, que dispuso su utilización
como residencia de jóvenes hasta hace unos 50 años.
A partir de entonces, su uso como edificio de cuadras para el ganado y su
total abandono posterior aceleraron su deterioro hasta su recuperación para
usos culturales por el Ayuntamiento de Villaobispo de Otero, mediante la
rehabilitación integral este año.
Los trabajos
La intervención se centrará en las cubiertas del edificio del siglo XVI,
los escudos y fachadas
El pasado día 4 de noviembre, una treintena de alumnos del Instituto de Enseñanza Secundara Lancia realizaron una hacedera de limpieza en el entorno del puente de San Marcos, dejando libre de interferencias a las orillas del río Bernesga en su travesía de la ciudad de León.
El trabajo efectuado fue muy bien comentado, tanto por la dirección del IES Lancia como por los socios de Promonumenta, que lo han calificado de ejemplar.
El Martes 5 de Noviembre a las 19:00 horas en la Sala Región del Instituto Leonés de Cultura, la Asociación Amigos del Patrimonio Cultural de León ProMonumenta y el Instituto Leonés de Cultura ofrecieron una conferencia titulada:»LA ARQUITECTURA ESCOLAR DE FRANCO DURANTE LA POSTGUERRA EN LEÓN» , impartida por el Historiador Javier Caballero Chica (ver fotografías y cartel).
Molino Sidrón, anexionado a la muralla, a la derecha de la foto.
El Molino Sidrón, en la Era del Moro. | MAURICIO PEÑA
No habrá seguramente costales de trigo,
maquilas o quintales de harina, pero el Molino Sidrón está cada vez más cerca
de volver a la vida.
La Junta de Gobierno Local del Ayuntamiento
de León aprobó este jueves una inversión de un millón de euros para
rehabilitar un edificio que se encuentra en el corazón de la Era del
Moro y que servirá para culminar la recuperación del entorno de la muralla
acometida durante los últimos años.
La reciente peatonalización de la avenida
de Los Cubos y de la calle Carreras se sumó a la
apertura de un solar que enlaza la plaza del Espolón con Ramón y Cajal y que
hasta hace poco se encontraba repleto de maleza y con tendejones que fueron
construyendo sus anteriores propietarios para utilizarlo a modo de desguace y
algunos de los cuales estaban adosados a las vigorosas paredes de adobe del
Molino Sidrón.
Su origen fue la molienda de cereal, pero con el paso del tiempo, este edificio
–de gran valor etnográfico– fue variando su actividad hasta acabar
prácticamente en el olvido. Ahora, el Ayuntamiento volverá a darle vida gracias
a los fondos europeos Next Generation y para darle un uso eminentemente
cultural. En este sentido, se habño en su día de convertirlo en la Casa de las
Letras Leonesas.
Se trata, en defintiva de que el Molono Sidrón, que a comienzos del pasado
siglo era el epicentro de los leoneses que se dedicaban al campo, lo sea ahora
de su cultura. La relevancia de la actuación se constata con la triple
declaración de Bien de Interés Cultural por la que se ve afectado: forma parte
del Conjunto Histórico de la Ciudad Antigua, es una parte
importante del entorno del Monumento Histórico Muralla Romana de León y también
del Monumento Histórico del Castillo.
La Era del Moro aún conserva restos del canal que movía las piedras del molino
y una edificación del mismo que resiste, vestigios de un pasado relacionado con
el sistema de presas y molinos que históricamente permitían la utilización de
la energía hidráulica en la ciudad, por lo que esta actuación está incluida
dentro del Plan de Sostenibilidad Turística en Destino Ciudad de León y es
perceptora de fondos europeos. Con el acuerdo adoptado ayer por la Junta de
Gobierno Local, comienza el proceso de licitación de este contrato mixto de
obras y servicios que implicará la redacción del proyecto, la dirección de
obras y la ejecución de las mismas. Una vez adjudicado este contrato, se
firmará el acta de inicio de la intervención cuyo plazo de ejecución será de 14
meses.