Conservación y puesta en valor de los restos hallados en la muralla
PATRIMONIO CULTURAL Patrimonio solicita al Ayuntamiento
de León una propuesta de integración en el proyecto de los restos arqueológicos
excavados en la calle Carreras
La Comisión
Territorial de Patrimonio Cultural, celebrada de manera presencial en el
Ayuntamiento de Posada
de Valdeón, y presidida por la delegada territorial, Ester Muñoz, ha acordado no
autorizar la propuesta del Ayuntamiento de León en el área afectada por la
excavación de la muralla romana en la calle Carreras. Deberá presentar una
propuesta de integración en el proyecto de los restos arqueológicos excavados
que permitan su conservación, exhibición, recreación y puesta en valor, ya que
presentan tramos que forman parte del monumento, pudiéndose continuar con el
resto de la obra que no afecta a dichos hallazgos.
«La Comisión ha acordado, primero, que se puedan continuar las obras en todo
aquello que no afecta a los restos arqueológicos encontrados y que forman parte
del monumento, y por tanto un bien protegido, y por otro lado, lo que sí se
deniega es la autorización del proyecto que había enviado el Ayuntamiento de
León antes de ver qué restos se habían encontrado, es decir, se solicita al
Ayuntamiento que se haga un nuevo proyecto en el que a estos restos
arqueológicos se les permita su conservación, exhibición, recreación y puesta
en valor, porque son parte del monumento y por lo tanto tienen que ser
altamente protegidos», ha explicado la delegada territorial.
Horreo en Valdeón
Además, la Comisión ha autorizado también los trabajos de musealización de
la necrópolis de la Ermita de San Juan en el Centro de Interpretación y
Recepción de Visitantes del Parque Nacional de los Picos de Europa en Posada de
Valdeón.
También ha dado luz verde a la colocación de un monolito en memoria de Víctor Manuel Ferrero en el entorno
del Monasterio
de Santa María de Sandoval, en el término municipal de Mansilla Mayor.
Patrimonio ha informado favorablemente del proyecto básico de restauración,
consolidación y puesta en valor del tramo 4 de la muralla de Almanza,
informando al Ayuntamiento que las obras que puedan afectar a bienes protegidos
deben ser sometidas a autorización de la Comisión para establecer las
condiciones de la ejecución.
Por último, se ha autorizado la intervención arqueológica asociada a la
ejecución del proyecto de restauración de los paramentos de la barbacana y
muralla almenada de los lados este y norte del Castillo de Valencia
de Don Juan, siendo estos trabajos supervisados por el Arqueólogo del Servicio
Territorial de Cultura y Turismo de León, e informando de que cualquier
hallazgo que pudiera producirse deberá ser entregado al Museo de León.
Visitando uno de los
hórreos de la zona.
Por último, el alcalde
del municipio, Tomás
Alonso Casares, en el turno de ruegos y preguntas ha puesto sobre la mesa la necesidad de
conservar los hórreos de la zona. En total existen 85, pero una treintena de
ellos se encuentran muy deteriorados por lo que se ha acordado que los técnicos
del servicio territorial de Cultura elaboren un informe sobre el estado de cada
uno, que posteriormente se traslade a la Dirección General de Patrimonio con el
objetivo de una posible intervención de manera conjunta con la Diputación de
León. «Se trata de bienes protegidos y que forman parte de la idiosincrasia de
esta zona», ha especificado Muñoz.
Al finalizar la reunión, la Comisión ha aprovechado para visitar el Centro de
Interpretación y Recepción de Visitantes del Parque Nacional de los Picos de
Europa en Posada de Valdeón, dónde se encuentran los restos de la necrópolis
que se están musealizando.
PROMONUMENTA OPINA: «Si ahora se tapan las cimentaciones de los cubos, claramente de origen romano, ¿por qué se critica a quienes los derribaron a finales de siglo XIX? Los argumentos de unos y de otros para defender sus actuaciones son los mismos: Hay que dar amplitud a la calle Carrera para transitar por ella.
DIARIO DE LEÓN 29-5-2022
URBANISMO
¿Hay que enterrar los cubos romanos de la Muralla en
Carreras?
Tapar los restos de las torres derribadas hace un siglo y marcarlos sobre
la calle Carreras peatonalizada es
la propuesta del Ayuntamiento de León. El Plan Director de las Murallas de
León, de 2008, admite esta solución, pero la supedita a los hallazgos y en
función de su valor plantea hasta su recuperación volumétrica. Los restos de
los cubos, destruidos a principios del siglo XX, serán enterrados de nuevo. La
Comisión Territorial de Patrimonio, que se reúne mañana, tiene la última
palabra.
Imagen virtual del proyecto de peatonalización de la calle Carreras aprobado por el Ayuntamiento de León. DL
Los restos de los
siete cubos de la Muralla romana que la piqueta derribó entre 1893
y principios del siglo XX serán enterrados si sale adelante el proyecto de peatonalización de la calle Carreras del Ayuntamiento
de León. Una solución que pasa por su marcaje en el suelo con una estructura
metálica y la instalación de unos bancos.
La obra de peatonalización cuesta 57.241 euros.
La Junta de Gobierno Local aprobó el proyecto el 13 de mayo con el título:
‘Obras de peatonalización. De la C/ Carreras y Avda Los Cubos para la
protección y puesta en valor de la Muralla de origen romano de León’. La
realidad es que los restos de los cubos, parte de la muralla romana del siglo
III, quedan tapados si se aprueba por la Comisión de Patrimonio.
El arqueólogo Fernando
Muñoz Villarejo, autor de la excavación arqueológica, está de acuerdo con
la idea municipal de tapar los restos encontrados. «Hemos
encontrado las cicatrices de las torres. El de la esquina (empalme con los
Cubos) está completamente destrozado por las construcciones o zanjas y no
pudimos saber si era cuadrado o circular», explica.
Cuatro de los siete
cubos presentan mejor estado de conservación. La inclinación de la
vía hacia la plaza del Espolón evitó que fueran tocados en su base y se ven
perfectamente los sillares. Son genuinamente romanos. Los
arqueólogos no tienen duda.
Vista de la calle Carreras con los restos de los cubos romanos que han aflorado
tras la excavación arqueológica. DL
El Plan Director de las Murallas de León plantea «una
solución ‘de mínimos’ urbanizando la zona, pero abierta y supeditada a los
cambios necesarios provocados por los posibles hallazgos arqueológicos»,
admite Melquiades Ranilla, arquitecto redactor de este plan.
Y es que el mismo plan
fija una partida presupuestaria de unos 133.000 euros (cifra desfasada tras 14
años) para el caso de que el valor de los restos exigiera su reconstrucción
volumétrica. «La filosofía restauradora del Plan Director está abierta al
cambio según los hallazgos que se realicen en las preceptivas excavaciones e
investigaciones arqueológicas», insiste Ranilla.
Uno de los empeños del
Plan Director es conseguir la «continuidad formal y volumétrica» de la Muralla
para «tener conciencia de la magnitud de la obra, tanto en un recorrido por la
zona superior del adarve, como en su recorrido por el exterior de la muralla, a
pie de calle», explica.
Por los cubos a la vista
Melquiades Ranilla,
redactor del Plan Director, y Emilio Morais, profesor de la Universidad de León
Existe esa continuidad
del monumento romano en el tramo que va desde la calle Ramón y Cajal, siguiendo
con la zona recuperada en la Era del Moro, hacia Puerta Castillo (plaza del
Espolón), la calle Carreras y por la Avda de los Cubos. Su apuesta por la
recuperación volumétrica de los cubos de la calle Carreras se basa en «los importantes restos aparecidos,
(sobre todo en los cubos más cercanos a la Plaza del Espolón)».
«Sería bueno recuperar
los hallazgos encontrados en las últimas excavaciones realizadas, (precisamente
para reencontrarnos con lo que queda) e intentar integrarlos en la nueva
concreción formal de la calle y así poder completar esa visión continua de la
muralla», manifiesta a preguntas de Diario de León.
No se trata de
reproducir de manera mimética las torres que siguen en pie, llamada
reconstrucción ‘en estilo’, pero «es posible recuperar los volúmenes de las
torres, teniendo en cuenta los criterios de restauración contenidos, por
ejemplo, en el Plan Director, que emanan de los tratados y cartas
internacionales más importantes relacionados con el tema y toda la normativa de
obligado cumplimiento», explica Ranilla. El arquitecto defiende que «existen
soluciones técnicas que permitirían plantear la integración de los restos
encontrados con una calle peatonal». En concreto, propone «diferenciar dos
niveles, uno de calle propiamente dicho y otro el de los restos (para su
contemplación desde la plataforma superior)».
«No nos debemos
conformar con ‘tapar bien los restos’ por si en el ‘futuro se decide
intervenir», opción que defiende el arqueólogo Fernando Muñoz. «El futuro es
hoy», insiste Ranilla. «No debemos perder esta oportunidad de recuperar y
mostrar nuestro legado cultural y abrir un debate en nuestra ciudad», añade.
Debate social
Sugiere un concurso
de ideas de equipos multidisciplinares —arqueología, arquitectura,
historia— para «encontrar la solución más bella y más adecuada para este tramo
de nuestras murallas». Y recuerda que el Plan Director contempla la posibilidad
de convocar de manera excepcional un Consejo de Fábrica y que expertos,
técnicos de las instituciones, técnicos del Plan Director, representantes del
Ayuntamiento de León y del Ministerio de Cultura y por supuesto ciudadanos
ayude «a tomar decisiones a las instituciones responsables y garantes del
Monumento».
«Es muy doloroso ver
esas cicatrices, esos muñones, esas amputaciones… y no intentar dar una
solución formal a las torres y lienzos de nuestra muralla», lamenta. «Hemos
trabajado en ciudades totalmente protegidas por su interés cultural como
Toledo, Astorga o Morella, lugares con calles muy, muy estrechas y con grandes
pendientes y hemos conseguido resolver problemas similares. En la calle Carreras
quedaría una superficie plana y un carril prácticamente libre.
Para el profesor de la
Universidad de León Emilio Morais, del Departamento de Historia del
Arte, los cubos romanos aparecidos «tienen que quedar a lavista como testimonio
de la historia más antigua y más reciente de la ciudad», precisa.
Morais, que ha
estudiado en profundidad el proceso de destrucción de las Murallas de León,
particularmente sus puertas, recalca que los restos de los cubos que han
aflorado en la excavación arqueológica pertenecen a la Muralla romana, que son
el símbolo del origen de la ciudad, y a la vez son «un vestigio de lo que se
hizo al tirarlos».
Dejarlos a la vista
«para que tengamos conciencia de lo que significa destruir el patrimonio» es su
posición como experto, que apela a arquitectos y arqueólogos para que «busquen
la solución». «No se puede enterrar», dice tajante. Es hora de que León empiece
«a tratar bien» a una muralla «no muy bien tratada» en el pasado más reciente.
El arqueólogo Fernando
Muñoz relativiza la destrucción que se llevó a cabo en los cubos de la
actual calle Carreras. «Es algo que se hizo en toda en Europa y en León no se
tiró más porque no había dinero». Fue en época del alcalde Mariano Sanz
Hernández, el 5 de enero de 1893, cuando se dictó la sentencia de muerte de
estos siete cubos en una sesión plenaria: «Tras celebrarse sin resultado dos
subastas para el suministro de morrillo con destino a las obras en que se han
de ocupar los obreros (…), el Ayuntamiento acordó que en la calle de la
Carrera hay algunos cubos de la muralla que pueden derribarse, lo que
proporcionaría material y trabajo a los obreros y también el ensanche de dicha
vía».
El derribo sirvió para abrir paso a la carretera de Asturias y su enlace
con la carretera de Santander, un acceso hoy obsoleto. Muñoz apunta a la
complicación de cambiar el nivel de la calle por las casas adyacentes. En
cuanto al paso de vehículos de emergencia, las máquinas de obra, de más de dos
metros, han trabajado con total normalidad. La Comisión de Patrimonio, que se
reúne mañana, tiene la última palabra.
Nunca hubo tanta gente como ayer en los últimos cincuenta años en lo que
una vez fue Santibáñez de Montes. El pueblo del Bierzo Alto sepultado por la
mina de carbón que le dio de comer durante buena parte del siglo pasado, la
aldea borrada del mapa en 2010, cuando dejó de existir como entidad
administrativa, la localidad de montaña, mal comunicada, que se desmoronó a
mediados de los años noventa bajo las voladuras del último cielo abierto,
revivió por unas horas con la expedición de la asociación Promonumenta, el
Ayuntamiento de Torre del Bierzo y un grupo de vecinos de Montealegre
(Brañuelas), empeñados en limpiar los muros que quedan de su iglesia dedicada a
San Juan Evangelista y los cimientos de las antiguas viviendas para convertir
las ruinas en una parada de la ruta circular de senderismo por el municipio que
financiarán medio millón de euros de los fondos europeos de Resiliencia.
Un voluntario,
encaramado entre un muro y un árbol. DL
Armados con desbrozadoras, y azadas, y motosierras, y podadoras, una
treintena de voluntarios trabajó durante toda la mañana para adecentar los
venerables restos de una iglesia hermanada con la de Santa Marina, cuyos
vecinos ya salvaron en su día algunos elementos ornamentales y el arco,
trasplantado en 2018 al templo de la población habitada. Y en su esfuerzo, a
pleno sol, brotaba ayer el último aliento de un pueblo devorado por el carbón.
«Y quieren volver el año que viene», decía, agradecido, el concejal Melchor
Moreno, que formó parte del grupo de trabajo.
Habitado durante décadas por mineros que tenían la explotación de
Antracitas de Brañuelas a la puerta de casa —todavía se habla en el Bierzo Alto
de la anécdota de un alcalde pedáneo que tenía un ojo de cristal y que llamó a
concejo para recuperarlo porque se le había perdido en el arroyo donde los
hombres se lavaban cuando salían del tajo— Santibáñez de Montes se fue
despoblado en los años cincuenta y sesenta, paradójicamente cuando arreglaron
un camino de acceso hasta un lugar al que hasta entonces se llegaba caminando o
a lomos de un burro, como recordaba en 2018 Julio Viloria, uno de los últimos
niños en nacer en el pueblo.
El desbroce ha sacado
a la luz la ruina de la iglesia y otras zonas. DL
Los últimos en dejar la aldea fueron un vecino apodado Perrín y
su esposa, recordaba Viloria. Ya no quedaba nadie más allí y nadie resiste
mucho tiempo en un lugar habitado solo por sombras. Así fue cómo Santibáñez se
convirtió en una suerte de Anielle, el pueblo abandonado de la novela La
lluvia amarilla de Julio Llamazares.
Fue a mediados de los años noventa, cuando ya parecía olvidada, cuando la
aldea reapareció en los periódicos debido al pleito que mantenía un ganadero
que había arrendado las viviendas vacías para que le sirvieran de establo a sus
vacas con el todopoderoso empresario minero Victorino Alonso. Fue una lucha de
David contra Goliath. Y esta vez ganó Goliath. Antracitas de Brañuelas compró,
una a una todas las viviendas, desalojó al ganado, y extendió el cielo abierto
del que todavía extraía el carbón dinamitando los inmuebles. Muchos de los
antiguos vecinos vendieron convencidos de que era lo último que podían hacer
antes de que les expropiaran las casas.
A mediados de los 90,
el pueblo vacío era un gran establo. MICH
Tres lustros después, con la mina a cielo abierto cerrada, escondidos sus
restos por la maleza, y la mayor parte de la estructura de la iglesia, el único
edificio que había sobrevivido, derrumbada, el Ayuntamiento de Torre aprobó en
sesión plenaria la disolución de Santibáñez como entidad legal. Sin gente. Sin
casas. Sin carbón. Y desde entonces, también borrado del mapa.
Pero la memoria de quienes nacieron y se criaron allí es terca. Y así fue
como en septiembre de 2018 —lo contó este periódico— los hijos de Manuel Moreno
Viloria, un antiguo vecino del pueblo emigrado a Portugalete, enterraron en el
cementerio, a la sombra de un roble y frente a los últimos restos de la iglesia
que ayer desbrozaron los voluntarios de Promonumenta, una parte de las cenizas
del difunto bajo una lápida negra. Manuel Moreno solía volver en verano al
Bierzo Alto y cada año llevaba a sus hijos a merendar en el pueblo abandonado.
Ayer, los voluntarios que quieren volver a poner a Santibáñez en el mapa le
dieron un nuevo aliento al pueblo. Pero quizá, la bocanada de aire definitiva
para que no se pierda la memoria de la aldea le llegue con el compromiso del
Ayuntamiento, adelantado por Melchor Moreno, de destinar fondos del Plan de
Mejora de Montes para adecentar su entorno. Será el triunfo final de Santibáñez
de Montes sobre el cielo abierto que se lo tragó hace un cuarto de siglo.
El pueblo no existe.
Apenas quedan algunas piedras, sobre todo de lo que fue la iglesia de San Juan
Evangelista, y el Pleno de Torre del Bierzo aprobó su disolución como entidad
jurídica hace algo más de una década. Pero una ruta de senderismo servirá ahora
para rescatar la memoria de Santibáñez de Montes, la localidad devorada por la
mina de carbón que durante décadas había dado de comer a sus habitantes y que
desapareció físicamente con las voladuras de la última etapa de la explotación,
a cielo abierto.
La asociación
Promonumenta, invitada por el Ayuntamiento y la pedanía de la vecina Santa
Marina del Sil —que ha rescatado en su propia inglesia algunos elementos del
templo de Santibáñez— desplazará hoy a 22 voluntarios, que sumados a un grupo
de vecinos de Santa Marina, dedicarán la mañana a desbrozar, retirar la maleza
y adecentar las ruinas de la localidad, según contaba ayer su presidente,
Marcelino Fernández.
Es otra señal de que
Santibáñez de Montes se resiste a desaparecer, después familiares de un par de
antiguos residentes hayan depositado en los últimos años cenizas de los
difuntos en lo que fue el cementerio de la localidad.
Santibáñez quedó
despoblado en los años sesenta del pasado siglo y en los noventa, los antiguos
dueños de las casas arrendaba sus viviendas como establos a un ganadero. Hasta
que la actividad de la mina a cielo abierto literalmente devoró lo que quedaba
de la aldea. El empresario minero Victorino Alonso, que pleiteaba con el
ganadero, compró todas las propiedades y las voladuras de la mina hicieron el
resto.
La pedanía de Santa Marina se ha preocupado en los últimos años en rescatar
elementos de la iglesia de Santibáñez como el arco trasladado e insertado en el
exterior del templo hermano, que también visitarán hoy los voluntarios de
Promonumenta.
La basílica de Marialba de la Ribera, lista para su musealización
PATRIMONIO La Diputación de León ha concedido
una subvención de 240.000 euros para este templo paleocristiano, considerado
uno de los primeros alzados en Hispania
La recuperación completa de la basílica paleocristiana de Marialba de la
Ribera, en Villaturiel, uno de los
monumentos más singulares, pero también más olvidados de la provincia de León, está cada vez más
cerca. A través del Instituto
Leonés de Cultura, la Diputación ha aprobado la concesión de una subvención de 240.000 euros
para el proyecto de musealización y equipamiento del edificio proyector
del yacimiento, todo ello gracias al ‘Programa R: Recuperar-Regenerar-Reactivar’,
señalan desde la institución.
En concreto, el proyecto aprobado prevé dos momentos fundamentales en lo que
será la futura visita
museográfica: uno inicial, ubicado sobre la plataforma de entrada al edificio y en el
que se proyectará un documento audiovisual de contextualización destinado a
ofrecer una adecuada introducción y ambientación geográfica e histórica en
torno al monumento, y una segunda parte en la que al visitante, desde cualquier
punto del recorrido, se le irá contando todo el proceso constructivo de la basílica
con apoyo de locuciones y de música, y también gracias a la iluminación de los diversos
elementos del edificio (transformación del ábside, las pilastras, el nártex, el
baptisterio y otros elementos).
Esto permitirá, desde la penumbra, ir revelando los restos completos de la
basílica con un orden
cronológico, así como los usos y ritos históricos asociados a los mismos, como
producto de sucesivas adiciones y transformaciones, hasta su momento final, en
el cual se da paso de nuevo a la ‘oscuridad’ a la que se llegó tras su
abandono.
Para poder realizar estas actividades resulta imprescindible dotar al edificio
del equipamiento de musealización necesario presupuestado en el proyecto, es
decir, instalaciones eléctricas, focos, motores, altavoces, pantallas LED de gran formato,
paneles acústicos, y las diferentes estructuras que den soporte y sujeción a
todos ellos.
Estas actuaciones, en su conjunto, suponen una inversión de 300.000 euros,
incluyendo los honorarios de los técnicos necesarios para la redacción del
proyecto, de los que el Instituto Leonés de Cultura, a través de su ‘Programa
R’, aporta 240.000 euros.
En cuanto a la historia de estos singulares restos, hay que recordar que Ramón Menéndez
Pidal destacaba, de entre las iglesias y edificios paleocristianos de España,
cuatro, a los que clasificaba como “martiriales” porque en ellos se conservaban
reliquias de ciertos mártires y, entre estos, la de Marialba de la Ribera sería
la mayor conocida en la
Península. Otros historiadores la han considerado una de las primeras
arquitecturas paleocristianas de la Hispania romana del siglo IV. En
esencia, el templo se construyó en dos fases: la primera sirvió para levantar
una nave con ábside de herradura y cubierta a dos aguas y, después, se transformó
en una planta centralizada cubierta con una cúpula o bóveda de arista. También
disponía de un nártex -atrio o vestíbulo, muy característico de este tipo de
edificios- y una piscina bautismal.
El ‘Programa R: Recuperar-Regenerar-Reactivar’, lanzado en febrero de 2021 con
un presupuesto de seis millones de euros, está destinado a restaurar edificios históricos que estén en
manos de ayuntamientos, juntas vecinales y fundaciones de la provincia leonesa,
y, a tenor de su buena acogida en todas las comarcas de esta tierra, más
adelante se vio reforzado con una edición suplementaria, dotada con dos
millones de euros. Se trata de la mayor partida económica destinada nunca a la
recuperación del patrimonio leonés, por cualquier tipo de institución, en un único
ejercicio.
Unanimidad para pedir que León sea Patrimonio de la Humanidad
POLÍTICA La iniciativa de Vox recibió en las
Cortes el apoyo de todos los grupos políticos, aunque el PSOE advirtió que
estarán «vigilantes»
Los grupos de las Cortes de Castilla y León aparcaron este miércoles
«la ideología» y las diferencias y se unieron para respaldar por
unanimidad que los principales monumentos de la ciudad de León y los ‘Pendones
Concejiles’ inicien el camino para contar con el reconocimiento de Patrimonio de la
Humanidad de la Unesco. La primera iniciativa presentada y defendida por Vox en el
pleno pretende, en esta nueva legislatura, es impulsar el reconocimiento de la
Catedral gótica, la Real Colegiata Basílica de San Isidoro, el antiguo convento
de San Marcos, las murallas de León y el edificio Botines de Gaudí como
Patrimonio de la Humanidad, lo mismo que para la tradición de los pendones del
antiguo Reino de León como bien cultural de carácter inmaterial.
En la defensa de la PNL, el procurador Miguel Suárez apeló a todos
los procuradores a apoyar el cuidado y la protección del patrimonio con
ejemplos de lo que representa cada uno de los monumentos leoneses para ser
Patrimonio de la Humanidad y el paralelismo con otras del resto de provincias
de la Comunidad. «Hoy defendemos León, la historia de León está en sus
edificios», argumentó el procurador en un alegato en favor del patrimonio
leonés.
El procurador socialista Diego Moreno se preguntó por
el retraso de la Junta en iniciar los trámites para el reconocimiento
solicitado en la PNL para los monumentos leoneses, de los que hizo
«gala», pero sostuvo que el patrimonio no es propio y «se debe abrir
al mundo entero». Así, aseguraron que su formación permanecerá
«vigilante».
Gavilanes,
del PP, terminó su intervención con el himno de León y Santos, de UPL, puso en
valor esta iniciativa de VoxEl popular Ricardo Gavilanes, que calificó la
presentación de la PNL como una «guía turística» de la ciudad y
provincia, argumentó que el Camino de Santiago ya recoge una protección para
estos monumentos y lamentó los escasos fondos para León en comparación con los
dados a Barcelona. El representante del PP terminó su intervención con las
primeras estrofas del himno de León.
Por su parte, el portavoz de UPL, Luis Mariano Santos, manifestó que el
proceso para la declaración es complicado y no es nuevo, pues añadió que se
repiten «caminos ya iniciados», si bien si consideró que es un
«sello e impulso turístico». «Por supuesto, vamos a apoyar lo
que planean», expresó el leonesista poniendo en valor la medida.
El procurador de Ciudadanos, Francisco Igea, anunció el voto a
favor de la propuesta, pero afeó a Vox que con las urgencias que propugnan de
«acabar con el comunismo», con una comunidad «liberticida»
o su lema de ‘Siembra’ la primera iniciativa sea esta. Por ello, el
representante de la formación naranja interpretó que la petición para la ciudad
de León busca desviar la atención del «bochorno» de los últimos días.
ntiguo convento de San Marcos, las murallas de León y el edificio Botines de Gaudí como Patrimonio de la Humanidad, lo mismo que para la tradición de los pendones del antiguo Reino de León como bien cultural de carácter inmaterial.
En la defensa de la PNL, el procurador Miguel Suárez apeló a todos los procuradores a apoyar el cuidado y la protección del patrimonio con ejemplos de lo que representa cada uno de los monumentos leoneses para ser Patrimonio de la Humanidad y el paralelismo con otras del resto de provincias de la Comunidad. «Hoy defendemos León, la historia de León está en sus edificios», argumentó el procurador en un alegato en favor del patrimonio leonés.
El procurador socialista Diego Moreno se preguntó por
el retraso de la Junta en iniciar los trámites para el reconocimiento
solicitado en la PNL para los monumentos leoneses, de los que hizo
«gala», pero sostuvo que el patrimonio no es propio y «se debe abrir
al mundo entero». Así, aseguraron que su formación permanecerá
«vigilante».
Gavilanes,
del PP, terminó su intervención con el himno de León y Santos, de UPL, puso en
valor esta iniciativa de VoxEl popular Ricardo Gavilanes, que calificó la
presentación de la PNL como una «guía turística» de la ciudad y
provincia, argumentó que el Camino de Santiago ya recoge una protección para
estos monumentos y lamentó los escasos fondos para León en comparación con los
dados a Barcelona. El representante del PP terminó su intervención con las
primeras estrofas del himno de León.
Por su parte, el portavoz de UPL, Luis Mariano Santos, manifestó que el
proceso para la declaración es complicado y no es nuevo, pues añadió que se
repiten «caminos ya iniciados», si bien si consideró que es un
«sello e impulso turístico». «Por supuesto, vamos a apoyar lo
que planean», expresó el leonesista poniendo en valor la medida.
El procurador de Ciudadanos, Francisco Igea, anunció el voto a
favor de la propuesta, pero afeó a Vox que con las urgencias que propugnan de
«acabar con el comunismo», con una comunidad «liberticida»
o su lema de ‘Siembra’ la primera iniciativa sea esta. Por ello, el
representante de la formación naranja interpretó que la petición para la ciudad
de León busca desviar la atención del «bochorno» de los últimos días.
El Gobierno central
tiene las llaves que reabrirían el Teatro Emperador, pero podría ser la Junta
de Castilla y León la institución adecuada para que el recinto volviera a
albergar cultura. Aunque el Ayuntamiento de León también estaría llamado a
liderar ese anhelo social. En definitiva, unos por otros, el teatro sin abrir.
Ayer, gracias a la convocatoria llevada a cabo por la Asociación Nacional de
Amigos de los Teatros Históricos de España, la ciudad volvió a hacer visible el
deseo de que el Emperador vuelva a ser un punto neurálgico de la cultura
leonesa.
La asociación,
presidida por Juan López Galiacho, y que cuenta entre su directiva con
Alejandro Conty, arquitecto leonés, hizo ayer todo lo que pudo. Reunió a un
buen grupo de leoneses, entre los que se pudo ver a activos de la cultura
local. Y mantuvo un encuentro con Evelia Fernández, concejala del Área de
Cultura y Patrimonio del Ayuntamiento de León. Ahí detectaron que «la solución
política es la única vía».
Al margen, está el
gran dossier que es un estudio acerca de las posibilidades no solo del
Emperador sino de la ciudad en torno al mundo del espectáculo.
Una vez más se hizo
balance de ese cierre del teatro, que supuso toda una pérdida del hilo del
relato, que hace que las instituciones de manera sutil se pasen la pelota y el
Emperador siga cerrado.
El Teatro Emperador
pertenece desde 2008 al Ministerio de Cultura, tras hacerse cargo de la compra
que realizó el Ayuntamiento de León a la Empresa Leonesa de Espectáculos. El
objetivo era implantar en el emblemático teatro el Centro Nacional de Artes
Escénicas y de las Músicas Históricas. Pese a que estaba previsto que la
restauración para tal fin se finalizara en el año 2011, el cambio de color
político en el Gobierno aparcó el proyecto sin que se haya retomado aún. Entre
2009 y 2011 se realizaron unas obras de adecentamiento, en las que se pintó la
fachada y se retiró el letrero luminoso que durante décadas colgó de su
entrada.
Amithe recuerda sus valores «como patrimonio histórico de la arquitectura
teatral española y así recuperar la memoria colectiva de los ciudadanos de León
para convertirle en un gran centro escénico y cultural del siglo XXI». Así se
puso al menos de manifiesto ayer, cuando en el Emperador hubo un taquillazo.
Ramóm Cañas en una conferencia de Promonumenta. A su lado Marcelino Fernández, presidente de Promonumenta (Foto David Gustavo López)
DIARIO DE LEÓN 25-5-2022
Mansilla Mayor reconoce a Ramón Cañas con el Premio Sandoval 2022
25 DE MAYO DE
2022, 3:35
El Ayuntamiento de
Mansilla Mayor ha reconocido con el Premio Sandoval 2022 la trayectoria del
arquitecto Ramón Cañas en edificios emblemáticos del Camino de Santiago y su
trabajo durante más de 20 años en el Monasterio de Sandoval.
Mansilla Mayor valora
con este galardón que el ayuntamiento retoma tras dos años de paro por la
pandemia con fuerzas renovadas para seguir poniendo en valor el rico patrimonio
del Camino de Santiago.
El jurado, formado por
el alcalde del municipio, José Alberto Martínez Llorente, los concejales Pablo
López Presa, Pilar Jiménez García y César José García González, el presidente
de Promonumenta, Marcelino Fernández, Jesús Sanz y Ana González Barriada,
decidía entregar este premio a Cañas por su «compromiso y dedicación durante
toda su carrera con el patrimonio y su trabajo durante más de 20 años como
arquitecto del Monasterio de Sandoval».
La entrega del
galardón se realizará en el Monasterio de Sandoval el próximo 4 de junio
(aniversario de su declaración como Monumento Histórico-Artístico en 1931) en
una ceremonia a la que no faltará el galardonado.
saga de arquitectos
Ramón Cañas es hijo, nieto y biznieto de arquitectos, y uno de los
profesionales más reconocidos de la provincia de León. Autor de restauraciones
de edificios emblemáticos del Camino como San Isidoro, el monasterio de
Carracedo o el Palacio de Grajal.
2,4 millones de euros para el Centro Arqueológico de Lancia
ARQUEOLOGÍA La Diputación aprobará este
miércoles una modificación de crédito para dotar al ILC de los fondos
necesarios para poder licitar y adjudicar este año las obras del nuevo
equipamiento cultural y turístico
El compromiso de la Diputación de León con el
yacimiento de Lancia se materializará este miércoles con la aprobación, por
parte del pleno de la entidad provincial, de una modificación de crédito
gracias a la cual se dotará al Instituto Leonés de Cultura (ILC) de los fondos
necesarios para poder licitar y adjudicar las obras del futuro Centro Arqueológico de
la Ciudad de Lancia a lo largo del presente 2022. Unos fondos que ascienden a un total
de 2.400.000
euros, gracias a los cuales se prevé alzar un edificio singular dedicado a la
investigación, la divulgación y el turismo.
Además, el responsable del estudio de arquitectura Gon Architects, Gonzalo Pardo –cuya propuesta
‘Piedra y tierra’ resultó ganadora en el concurso público convocado por el ILC
para elegir el proyecto del citado centro–, ofrecerá también este miércoles una
conferencia en la que explicará todos los detalles de este nuevo equipamiento
cultural. La charla tendrá lugar a las 19:30 horas en la Sala Región del ILC (calle
Santa Nonia, 3), con acceso libre y gratuito. En el transcurso de la misma se
presentará tanto un audiovisual que gira en torno a la enorme transformación
experimentada por el yacimiento a lo largo de los últimos meses como un libro
en el que se recoge la propuesta ganadora y el contenido de los cinco proyectos
finalistas. Gracias a esta nueva publicación, editada directamente desde el
Instituto Leonés de Cultura, la sociedad podrá conocer de primera mano el
proceso según el cual ‘Piedra y tierra’ resultó elegida, así como el
talento, la vanguardia y el gran interés de todas las propuestas presentadas al
concurso y que resultaron finalistas. La publicación ya está a la venta, a un
precio de 12 euros, tanto en librerías como en la propia sede del ILC. Además,
sus maquetas permanecieron expuestas durante más de tres meses en la nueva sala
polivalente del Instituto.
Tal y como se recoge en el proyecto básico, el Centro Arqueológico de la Ciudad
de Lancia se desarrolla en tres edificaciones levantadas con una estructura de
tierra y madera sobre las que se asienta una piel de corcho natural y cerámica,
con un total de 853
metros cuadrados construidos. La primera de las edificaciones albergará una cafetería
y un espacio de recepción, la segunda un completo centro de interpretación y la
tercera un espacio apto para la investigación arqueológica y para la
realización de actividades culturales y didácticas. La actuación se completa
con la urbanización de una senda con especies vegetales que conectará las tres
edificaciones con una nueva zona de aparcamiento.
En los últimos meses se ha podido completar el proyecto básico de este centro y
está en vías de terminarse tanto el proyecto de ejecución de los edificios como
de sus nuevos accesos, en desarrollo de la idea ganadora. Esto ha permitido
estimar que la inversión total necesaria para su construcción asciende a
2.400.000 euros incluyendo impuestos, obra, equipamiento y museografía.
Además de las iniciativas llevadas a cabo por el ILC en los dos últimos años
(instalación de vallados y de paneles informativos, acondicionamiento de áreas
de aparcamiento, mejora de accesos, exploración con georradar, compra de las
fincas cercanas, excavación del foro y contratación de trabajos de
consolidación de los restos existentes), la última iniciativa tomada por el ILC
para subrayar la importancia de Lancia ha sido dotar al yacimiento de un
horario fijo de apertura de puertas, con una persona encargada para ello, de
18:00 a 20:00 horas de martes a sábado, excepto los festivos, con acceso
gratuito.